Un día por la ciudad más sorprendente de España

Nos encantó mucho conocer Madrid, nos dejó sin palabras todo lo que pudimos ver en esos días, ojala volvamos pronto para probar más de su deliciosa gastronomía.

Ahora nos tocaba seguir con nuestro siguiente destino que se encuentra a 4-5 horas de Madrid en bus. Para ello salimos temprano del hospedaje pero antes nos dimos tiempo para desayunar y despedirnos, todo estuvo genial, nos sentimos como en casa. 

Ya con nuestras mochilas listas, tomamos el metro hacia la Estación Las Américas, que se encuentra conectada con el intercambiador de buses. Esperamos un poco cerca a nuestra puerta de salida, con nuestro boleto impreso, no es muy caro, si realizas el pago por Internet además lo hicimos con bastante anticipación, hay muchas ofertas y horarios para escoger.

Super emocionadas, descansamos un poco en el bus y en un abrir y cerrar los ojos llegamos a la Terminal Gurtubay Kalea de Bilbao

Llegamos un jueves a las 2:30 de la tarde y habían muchos turistas que también venían a visitar Bilbao. El terminal es abierto pero cuenta con lo básico; eso sí el baño es pequeño y se hace una larga fila (típico en el baño de mujeres) sólo queda tener paciencia, también encuentras unos lockers o casilleros (frente a la cafetería) para dejar tus maletas o mochilas si aún no puedes hacer check-in en tu hospedaje y así poder pasear más relajada (o) por Bilbao, sin preocuparte por tus maletas. 

Bilbao está situado al norte de España y es capital de territorio de BizKaia; incluimos Bilbao a nuestros planes por una sencilla razón, conocer el famoso Museo Guggenheim. A medida que caminábamos por esas calles con una arquitectura singular y tradicional, nos emocionaba mucho saber que ya estábamos muy cerca a ese imponente e impresionante museo.

Camino al Museo Guggenheim, llegamos al Centro Azcuna, bastante interesante porque conserva su arquitectura original por fuera y por dentro es muy moderno, al principio no sabíamos por donde ingresar, como ven en la foto pensamos que éste era el frente.

El Centro Azcuna es un antiguo almacén de vino que fue reconvertido en un centro de ocio y cultura, en su interior encontramos cines, auditorios, bibliotecas, sala de exposiciones, gimnasios, restaurantes y más.

Centro Azcuna

Detuvimos por un momento nuestro camino al ver este edificio que se asomaba en una esquina, que nos llamó mucho la atención, es bastante original y obviamente inconfundible por su fachada poliédrica , nos encantó. Nadie se imaginaría que éste edificio, llamado sede de Osakidetza, es la oficina del Gobierno local, donde se encuentra la Delegación Territorial de Sanidad y consumo de Bizkaia. Inimaginable ¿o no?? yo pensé que era una galería de arte o algo similar.

Sede de Osakidetza

Edificio Sede de Osakidetza

Seguimos caminando sin antes pasar por alto que no había nada de gente en las calles, solo nosotras, teníamos la sensación de que estaba deshabitada, ningún comercio o tienda estaba abierta, pese a que llegamos en día de semana y en la tarde, luego nos informamos que en Bilbao los horarios de descanso o siestas, sí se toman en serio, nos pareció muy buena la idea del descanso después del almuerzo pero nosotras no habíamos almorzado aún y los centros comerciales vuelven a atender hasta las 4 de la tarde, así que nos quedó seguir caminando hasta llegar a la cafetería del museo, felizmente en nuestra mochila de mano, no podía faltar el agua, fruta y algunos snacks que compramos un día anterior en Madrid.

Plaza Moyúa

Una forma de guiarse para llegar al Museo Guggenheim, es si desde lejos ves éste edificio, que obviamente desencaja mucho después de ver tanta arquitectura tradicional a su alrededor.

Por fin llegamos y en la entrada al museo nos recibe Puppy, un lindo West Highland Terrier gigante, obra del artista Jeff Koons, está cubierto con muchas hermosas flores y la finalidad principal de este diseño es difundir optimismo, confianza y seguridad. En realidad es sorprendente la combinación de los colores, no puedes olvidar tomarte una foto con Puppy. Y el museo es imponente y hermoso tanto de día como de noche.

Decidimos cruzar por el Puente de La Salve, que cruza la Ría de Bilbao, desde ahí las tomas son geniales, ves el museo en toda su dimensión. Nos quedamos en medio del puente porque queríamos  ingresar lo más pronto posible al imponente museo de Bilbao.

En este vídeo te muestro nuestro recorrido completo por Bilbao.

El Museo Guggenheim es obra del arquitecto Frank O. Gehry, para su fachada utilizaron titanio y cristal luminoso, y alberga obras de arte del siglo XX.

El museo parece un gigantesco barco de titanio que está a punto de embocar sobre la Ría, realmente único y sorprendente verlo a la hora de la puesta del sol, es sencillamente mágico.

Ingreso al museo

No calculamos muy bien las horas y nos dejamos llevar por todo lo que vimos en el interior del museo, salas de proyecciones, arte contemporáneo y nos asombramos con un viaje por los talleres de los famoso artistas a través de la  realidad virtual. 

Ya con menos gente alrededor mi hermana quería saborear, tocar, ver más de cerca al museo, bueno sentir ese suave recubierto de escamas (cosas de arquitectos).

Museo Guggenheim

Cerca a "Puppy", te recomiendo entrar a la oficina de información Turistica de Bilbao, antes de entrar al museo ya que puedes consultar, gratuitamente, qué otros lugares turísticos de interés puedes visitar los días que estés en Bilbao, ellos te dan buenas opciones para que no te pierdas nada. Incluso te orientan sobre los hoteles, restaurantes, hasta la farmacia más cercana y sus horarios disponible que puedes encontrar en la ciudad. Información muy completa y buenísima atención, a cambio de unas preguntas sencillas para su perfil turístico, cómo de que país provienes, cuánto tiempo te quedas en Bilbao y sí es por negocios, placer u otro motivo. 

"Puppy" obra del artista Jeff Koons

Ya en la noche las luces se encienden para darnos cuenta de esa encantadora atmósfera navideña que se esparce por todo Europa. Nos sorprendió la cantidad de luces y arreglos navideños en todas la calles, y así como la cantidad de gente que se empezaba a salir a las calles después de trabajo pesando en algún plan con los amigos, ir a centros comerciales, etc. 

Fuimos en busca del famoso Puente Calatrava o Puente Zubizuri, diseñado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava. Casi nos lleva el ventarrón al pasar por el puente, felizmente logramos cruzar; desde este punto, de noche la ciudad  se ve genial. Me pregunto si algún día el rió Rimac de Perú se podrá asemejar al Paseo Uribitarte, un paseo tan tranquilo, con pistas peatonales, corredores, tanta seguridad y limpieza, ojala que pronto.

Puente Calatrava

Paseo Uribitarte

Estadio San Mamés

Nos fascinó conocer un poco de Bilbao pero nuestro recorrido sigue, fuimos a la terminal de buses Gurtubay en busca de nuestras mochilas, a cenar cerca y a registrar nuestro pasaje. En el mismo  terminal encuentras las casetas para comprar pasajes, ya nosotras lo habíamos hecho por la web de la empresa , pero si la ruta es hacia otro países, es importante presentarte a cambiar los boletos impresos por unos registrados, presentando también tu pasaporte, así confirmas tu salida.

Bastante cansadas y con ganas de quedarnos un poco más, esperamos nuestro bus hasta pasada la media noche en el terminal, cenamos en la cafetería porque movernos con las pesadas mochilas no era necesario. Horas antes de partir conocimos a Fabiola de Brasil, que vive ya bastante tiempo en España, y nos contaba que iba a visitar a una amiga cerca a nuestro siguiente destino, para pasar navidad y año nuevo. Muy encantadora y buena onda nos contó de sus viajes por varias ciudades de Europa. Ya en el bus nos siguió contando de todas sus increíbles experiencias y recomendaciones. Nos encantó conocerla así que intercambiamos correos para seguir en contacto.Y así seguimos a nuestro siguiente destino soñado y considerado el destino más romántico de todos. 

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